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domingo, 12 de junio de 2011

MI HOGAR, MI IGLESIA

"Los saludan todas las congregaciones que se encuentran en Asia. Aquilas y Priscila les envían un saludo muy afectuoso en nuestro Señor, juntamente con la congregación que está en su casa" (1 Corintios 16.19)

Yahshua había muerto y había ascendido a los cielos, el Espíritu Santo había sido derramado con potencia y muchos miles habían aceptado la fe como es en Yahshua. Pronto los primeros "Cristianos" comenzaron a "molestar" en las sinagogas y en la ciudades de los judíos. Desterrados y echados de todas partes, los hogares de cada uno de los creyentes comenzaron a desarrollarse como verdaderas iglesias.

Hoy entendemos de forma muy equivocada lo que es una IGLESIA. Al escuchar esta palabra que deriva del griego EKKLESIA, pensamos inmediatamente en un edificio o en una corporación determinada o denominación. Pero ekklesia abarca mucho más que eso. Ekklesia era un acto, una acción, el acto y la acción de congregarse, de reunirse para adorar al Padre y al Hijo, que los primeros cristianos realizaban.

De ahí que Pablo en su carta a los corintios diga: "envían un saludo muy afectuoso en nuestro Señor, juntamente con la congregación que está en su casa". Los hogares y los prados eran los templos de aquellos humildes siervos de Yahshua. El orden y la unidad se mantenía por las visitas, cartas y recomendaciones que los misioneros o apóstoles transmitían. Los cargos no eran tampoco como hoy los imaginábamos, sino que eran DONES DE SERVICIO. Un APÓSTOL, PASTOR, OBISPO u PROFETA, no era superior a su hermano, muy por el contrario el grado de humildad existente hizo que el mundo reconociera que habían estado con Yahshua.

Los hogares de aquellos cristianos fueron lo que E. G. White describe que debiéramos nosotros hacer: "La misión del hogar se extiende más allá del círculo de sus miembros.  El hogar cristiano ha de ser una lección objetiva, que ponga de relieve la excelencia de los verdaderos principios de la vida.  Semejante ejemplo será una fuerza para el bien en el mundo... Al salir de semejante hogar paterno los jóvenes enseñarán las lecciones que en él hayan aprendido.  De este modo penetrarán en otros hogares principios más nobles de vida, y una influencia regeneradora obrará en la sociedad" (El Hogar Cristiano, Pág. 25)

Pero la iglesia que es mencionada en Corintios no es la única, veamos como esta era una costumbre en aquel tiempo:


"Pablo, prisionero de Jesucristo, y el hermano Timoteo, á Filemón amado, y coadjutor nuestro; Y á la amada Apphia, y á Archîpo, compañero de nuestra milicia, y á la iglesia que está en tu casa" (Filemon 1:1,2)

Al perder estas reuniones en el tiempo y organizar la iglesia en CORPORACIONES, hemos perdido el estudio sencillo de las Escrituras. La verdad ha sido grandemente velada a los ojos de muchos corazones sinceros. Por eso, queremos hoy animarte a que des este paso. Hazte estas preguntas:

1.- ¿No te ha pasado que estando en la iglesia te han surgido dudas y no pudiste resolverlas debido a la excesiva cantidad de miembros?

2.- ¿No te ha pasado que ya casi no conoces quienes son los miembros de tu iglesia?

3.- ¿No te ha pasado que por el gran numero de miembros en un solo lugar, notar que nadie escucha a nadie?

4.- ¿Has notado como las predicaciones se han convertido en discurso monótono por parte del predicador sin preguntas y sin análisis?

Si quieres volver a las fuentes, si quieres volver a sentir el fuego de Dios en tu vida, contactanos y te haremos llegar material pertinente.

Shalom, y que el Espíritu de Yahshua este en tu corazón siempre!

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