La vida muchas veces parece un vertiginoso cochecito de montaña rusa; sube y baja, sube y baja, y pareciera que alguien se estuviese burlando de nosotros. Para un creyente las bajadas serán los momnentos "de prueba" para quién no cree en nada, "solo una mala pasada". Sin embargo, ambos, comparten un punto en común... No tienen completa paz.
Shalom, en hebreo tiene un doble significado, y aún en nuestro idioma no podríamos traducirlo correctamente: "Paz y Bendición".
Pero esta "paz" no es la paz que obtenemos tras conseguir un buen empleo, saldar todas nuestras deudas, ver los buenos resultados de nuestro ultimo chequeo medico... No, es la Paz de Elohim, la que proviene de lo alto y que en su descenso hasta nosotros no sufre variación alguna. Es VERDADERA PAZ. Y lo primero que hace es aliviarnos...
"Mis paz os dejo, mi paz os doy..."
Dijo una vez Yahshua poco tiempo antes de sufrir la muerte más angustiosa que podía un ser humano sufrir, y aún más. Porque Yahshua cargo con la culpa de cada uno de nosotros. El sufrio la muerte segunda, de la cual cada uno de nosotros fuimos libertados.
Pero... Volviendo al tema de la paz, ¿Lo haz notado?... Yahshua aún estando en camino a su peor martirio, podía todavía decir: "Mi paz..." MI PAZ... todavía tenía PAZ... Tenía Shalom. Y nos la deja para que nosotros la tomemos y disfrutemos de lo mismo, no solo de un poco, sino de lo mismo.. Pues como él lo dijo: "Yo vine para que tengan vida y la tengan en abundancia"...
De la bendición que incluye el Shalom... Hablaremos otro día... por lo pronto, te invito a que busques esa verdadera paz. Dobla tus rodillas (pero principalmente las del corazón), y ruega al Padre que te de SHALOM.
Bendiciones, que el Espíritu de Yahshua more en ti siempre!